Cristo es hoy Espíritu y Vida

A- Cristo es Espíritu: (Romanos 8:9)

La Biblia dice que Cristo entró en la muerte y estuvo allí tres días, pero no se quedó allí. El tercer día resucitó espiritual y físicamente (1 Corintios 15:3-4). Los numerosos testigos de su resurrección, los que vieron, hablaron con El y anduvieron con El, son un testimonio contundente de un hecho histórico que ha permanecido innegable por lo últimos dos mil años (1 Corintios 15:5-7). Sócrates murió; Napoleón, Alejandro Magno, Carlos Marx, Mahoma, Buda y Confucio todos murieron. ¡Pero Jesucristo está vivo. Su sepulcro es un sepulcro vacío, y El vive dentro de los espíritus de millones de creyentes hoy.

En la naturaleza podemos ver cada día el principio de la resurrección. Cuando se siembre un grano de trigo en el suelo, aparentemente muere. De hecho lo único que muere es la cáscara. Muy pronto sale en una forma mejor y más gloriosa. De manera semejante Cristo en su resurrección no sólo se le dio vida, sino que también cambio a otra forma. La Biblia dice que El cambio y vino a ser el Espíritu vivificante (1 Corintios 15:45). Cuando estuvo en la tierra, estuvo en la carne. En la resurrección llegó a ser Espíritu. La carne era su forma antes de su resurrección y el Espíritu es su forma después de resucitar. El Apóstol Pablo nos dice que la primera forma, la carne fue sembrada "en deshonra" "en debilidad" y era "terrenal"; pero la segunda forma es Espíritu vivificante esta "en gloria" "en poder" y es "celestial" (1 Corintios 15:43,48).

Cuando Cristo vivía en la tierra, no estaba disponible a los discípulos. Cuando estaba en Galilea, no podía estar en Jerusalén. Estaba restringido por el tiempo y el espacio. No podía estar presente con toda la gente todo el tiempo. Pero después de que Cristo resucito, se hizo Espíritu. Como Espíritu El ahora puede estar con sus discípulos todo el tiempo. Es por eso que después de su resurrección, El pudo decir que estaría con los discípulos hasta el fin (Mateo 28:20).

En resumen podemos entender a Cristo tanto como Espíritu y como Dios (Padre) en la dispensación del Dios Triuno (Trinidad). Cuando una persona cree en el Señor Jesús, el Espíritu viene a esta persona y vive en ella. En 2 Timoteo 4:22 dice que el Señor Jesucristo está en nuestro espíritu. No necesitamos ir al cielo para encontrar a Dios. El lugar más santo ahora está en nuestro espíritu. Cuando se instala la electricidad en una casa, todo lo que tiene que hacer el dueño es subir el interruptor. Hoy el Espíritu está "instalado" en este universo: Cristo cumplió toda la obra y hoy como el Espíritu vivificante está en todas partes. Cuando invocamos el nombre del Señor, nuestros espíritus "están prendidos" y podemos experimentar todo lo que es Dios.

B - CRISTO ES VIDA. (Juan 14:6)

"El espíritu es el que da vida", ¿Qué es esta vida que da el Espíritu? Sabemos que hay muchas formas de vida. En este mundo existe la vida vegetal y la animal. La vida vegetal es más baja y la vida animal es más elevada. Más elevada que estas dos clases de vida es la vida humana. Hoy varias formas de vida vegetal y vida animal abundan en la tierra y los hombres que poseen la vida humana, también llenan el globo terrestre. Todas estas vidas son maravillosas; pero hay una cuarta vida; la vida divina, que es la vida increada de Dios. La vida más baja existe para servir a la vida más elevada. Así la vida vegetal existe para la vida animal y mantiene la vida animal y la vida animal existe para la vida humana. Según el mismo principio, la vida humana existe para la vida divina.

¿Cuáles son las características de esta vida, más elevada?
1ro Es la vida de Dios, es divina. Ser divino significa ser de Dios, tener la naturaleza de Dios y ser trascendente y distinto de los demás (Juan 17:3).

2do Es una vida eterna también es indestructible e indisoluble. No existe nada para destruir esta vida indestructible de Dios. Permanece para siempre. Si uno pone en la tumba la vida divina, la tumba se abrirá de golpe (Romanos 2:7). Si se pone esta vida en cualquier situación negativa, esa situación no podrá dominarla. La vida eterna es una vida, indestructible y nada en la tierra, en los cielos, ni en el infierno puede destruirla.